Festejando sus 104 años de existencia, y hasta con un chivo de mascota en la tribuna, Liniers completó una noche perfecta que lo sigue ubicando puntero en la tabla con 12 puntos.
Durante los primeros minutos la visita parecía incomodar a la defensa de Liniers que mostró un grado de distracción, la visita tenía con qué pelear y lo hizo durante todo el primer tiempo. Las cosas cambiarían cuando a los 11 minutos, tras un tiro libre perfecto de Gastón Arroyo que cae a la cabeza de Julio Acosta, quien en tierra de gigantes coloca la pelota en el palo derecho de Gerardo Fibiger. 1-0 para Liniers, quien nuevamente marcaba un gol de pelota parada.
Pero todavía faltaba mucho, apenas 11 minutos después, luego de una excelente corrida de Ballestero, la pelota cae en Lagrimal quien desborda por derecha y coloca un centro para que el delantero Mc Coubrey le gane las espaldas a los defensores y coloque el 2-0.
En apenas 22 minutos el chivo había marcado dos tantos, y el rival comenzaba a inquietarse. Se notaban claras diferencias en el mediocampo, si bien la contextura de los jugadores locales superaba ampliamente a la del rival, lograron provocar problemas sobre los costados, y los chivos Ballestero y Lagrimal tuvieron un interesante trabajo cortando la salida de Aita y Ojeda.
En los últimos minutos del primer tiempo Gastón Arroyo desperdició un tiro libre, que se fue desviado por el segundo palo del arquero visitante. Y el portero local, Lucas Partal, tuvo una excelente intervención adelantándose en una jugada peligrosa.
Así se fueron los primeros 45 minutos, Agropecuario, que intentó jugar siempre por abajo, algo que los complicó ya que la cancha estaba muy rápida. Allí fue donde Liniers usó su inteligencia, fue más práctico y volvió a convertir por la vía aérea.
Ya en el segundo tiempo, apenas a los 3 minutos llegaría el descuento de los visitantes: el “pelado” Reyes levantó la mirada, enganchó, y frente al mal despeje de Mauro Martínez, la pelota le cayó al delantero Turienzo –quien frente a la imposibilidad de Partal- de zurda colocó el partido 2-1.
Agropecuario, un equipo interesante de mitad de cancha en adelante sintió el envión anímico que lo impulsó a estar en el campo rival por varios minutos.
Por el lado de Liniers, se notaba la buena asociación en la mitad de la cancha de Ballestero y Lagrimal, aunque no podían dar la tecla en el pase final.
Una de las más claras llegó a los 15 minutos, tras un nuevo centro de Arroyo, que Mauro Martínez cabeceó apenas unos metros fuera del palo izquierdo del arquero.
Pasaban los minutos, y el equipo visitante sentía la presión, centros pasados que no tenían destinos, falta de profundidad y foules sin sentido que favorecían a Liniers para enfriar el trámite del partido. Pese a esto lograron complicar al local, ya que subían con mucha gente.
Otra clara para Liniers fue a los 29 minutos, y estuvo en los pies del delantero Mariano Mc Coubrey quien recibió en la puerta del área, enganchó y pateó frente al arco, donde Fibiger voló para mandarla al córner.
Cerca del final, Agropecuario empezó a empujar, con más corazón que juego. Liniers, que le cuesta cerrar los partidos, supo defenderse y pegar en los momentos justos. De ésta manera, el árbitro cipoleño José Higueras pitó y desató la locura de la gente chiva que sufrió, pero ganó.
Con éste resultado, consigue su cuarta victoria consecutiva, y se ubica primero en la zona 4 del torneo Argentino B, con 12 puntos.
Durante los primeros minutos la visita parecía incomodar a la defensa de Liniers que mostró un grado de distracción, la visita tenía con qué pelear y lo hizo durante todo el primer tiempo. Las cosas cambiarían cuando a los 11 minutos, tras un tiro libre perfecto de Gastón Arroyo que cae a la cabeza de Julio Acosta, quien en tierra de gigantes coloca la pelota en el palo derecho de Gerardo Fibiger. 1-0 para Liniers, quien nuevamente marcaba un gol de pelota parada.
Pero todavía faltaba mucho, apenas 11 minutos después, luego de una excelente corrida de Ballestero, la pelota cae en Lagrimal quien desborda por derecha y coloca un centro para que el delantero Mc Coubrey le gane las espaldas a los defensores y coloque el 2-0.
En apenas 22 minutos el chivo había marcado dos tantos, y el rival comenzaba a inquietarse. Se notaban claras diferencias en el mediocampo, si bien la contextura de los jugadores locales superaba ampliamente a la del rival, lograron provocar problemas sobre los costados, y los chivos Ballestero y Lagrimal tuvieron un interesante trabajo cortando la salida de Aita y Ojeda.
En los últimos minutos del primer tiempo Gastón Arroyo desperdició un tiro libre, que se fue desviado por el segundo palo del arquero visitante. Y el portero local, Lucas Partal, tuvo una excelente intervención adelantándose en una jugada peligrosa.
Así se fueron los primeros 45 minutos, Agropecuario, que intentó jugar siempre por abajo, algo que los complicó ya que la cancha estaba muy rápida. Allí fue donde Liniers usó su inteligencia, fue más práctico y volvió a convertir por la vía aérea.
Ya en el segundo tiempo, apenas a los 3 minutos llegaría el descuento de los visitantes: el “pelado” Reyes levantó la mirada, enganchó, y frente al mal despeje de Mauro Martínez, la pelota le cayó al delantero Turienzo –quien frente a la imposibilidad de Partal- de zurda colocó el partido 2-1.
Agropecuario, un equipo interesante de mitad de cancha en adelante sintió el envión anímico que lo impulsó a estar en el campo rival por varios minutos.
Por el lado de Liniers, se notaba la buena asociación en la mitad de la cancha de Ballestero y Lagrimal, aunque no podían dar la tecla en el pase final.
Una de las más claras llegó a los 15 minutos, tras un nuevo centro de Arroyo, que Mauro Martínez cabeceó apenas unos metros fuera del palo izquierdo del arquero.
Pasaban los minutos, y el equipo visitante sentía la presión, centros pasados que no tenían destinos, falta de profundidad y foules sin sentido que favorecían a Liniers para enfriar el trámite del partido. Pese a esto lograron complicar al local, ya que subían con mucha gente.
Otra clara para Liniers fue a los 29 minutos, y estuvo en los pies del delantero Mariano Mc Coubrey quien recibió en la puerta del área, enganchó y pateó frente al arco, donde Fibiger voló para mandarla al córner.
Cerca del final, Agropecuario empezó a empujar, con más corazón que juego. Liniers, que le cuesta cerrar los partidos, supo defenderse y pegar en los momentos justos. De ésta manera, el árbitro cipoleño José Higueras pitó y desató la locura de la gente chiva que sufrió, pero ganó.
Con éste resultado, consigue su cuarta victoria consecutiva, y se ubica primero en la zona 4 del torneo Argentino B, con 12 puntos.
SINTESIS
LINIERS (Bahía Blanca): (2) Lucas Partal; Mauro Martínez, Andrés Podlesch, Gonzalo Troncoso, Hernan Rosell; Facundo Lagrimal, Gastón Arroyo, Nicolás Ballestero, Joaquín Correa; Mariano Mc Coubrey, Julio Acosta. D.T.: Alberto Desideri.
AGROPECUARIO ARGENTINO (C. Casares): (1) Gerardo Fibiger; Maximiliano Ojeda, Julio C. Caldiero, Martín Curuchet y Leonardo Aíta; Maximiliano Buratini, Fernando Sellanes, Juan Todino y Ariel Reyes; Matías Palacio y Federico Turienzo. D.T.: Andrés Zerillo.
GOLES: 11' Julio Acosta (L) - 22' Mariano Mc Coubrey (L) - 48' Federico Turienzo (A).
CAMBIOS: 75' Octavio Videla por Joaquín Correa, 80' Iván López por Mariano Mc Coubrey y 91' Hugo Iubatti por Andrés Podlesch (L) - 45' Samuel Funes por Maximiliano Ojeda, 62' Sebastián Costa por Matías Palacio y 74' José Cignoli por Maximiliano Buratini (AA).
AMONESTADOS: 25' Andrés Podlesch (L) - 35' Martín Curuchet (AA) - 39' Gastón Arroyo (L) - 63' Gonzalo Troncoso (L) - 67' Federico Turienzo (AA).
ARBITRO: José L. Higueras.
ESTADIO: “Dr. Alejandro Pérez”
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