23 de octubre de 2012

Despacito.. despacito.. Santa se acerca.


El primer tiempo fue pésimo. Sin fútbol, ambos se dedicaron a no descuidarse en la retaguardia y esperar al rival. Empezó un poco mejor el “chaira”, con las escapadas de Gonzalo Abán, que entusiasmó un rato, pero después se esfumó del partido. Enfrente, González se hizo cargo de su rol de conductor en Santamarina, pero sin precisión ni conexión con sus delanteros.

Un intento de Altamirano al palo de Bertoya a los 12 minutos fue el único tiro al arco de un Racing inexpresivo, que nunca encontró la llave del juego y terminó facilitándole la victoria a un Santamarina que hizo poco, pero dejó una mejor imagen.
Once contra once, fue parejo, muy disputado, con un buen trabajo de Ramiro Jorge en el centro del campo, que le daba mayor peligrosidad a la salida visitante, aunque de a poco, el aurinegro lo fue controlando y empezó a jugar más cerca del arquero Martín Mocoroa.
Pero no hubo fútbol. Casi nada. Santamarina consiguió combinar un par de veces y levantar a sus hinchas, especialmente a los 15 minutos, con una buena escapada de González por la izquierda, que encontró la cabeza de Tellas, que obligó a Mocoroa a meter una tapada fenomenal. Recién a los 42’ el local volvió a inquietar al 1 de Racing, con un tibio remate de Román Strada a las manos del guardavalla.
El sádico del árbitro marplatense Federico Presa dio tres minutos de adición en esa primera etapa, castigando a los hinchas (de ambos equipos) a soportar el bodrio un rato más.
El segundo tiempo arrancó igual, pero en Racing tomaron una decisión fatal. Le facilitaron el partido a Santamarina. Con equipos completos, el partido se encaminaba a un soporífero empate en 0, que no sería recordado por nadie y obligaría a los fanáticos irremediables (de ambos equipos), que soportaban la lluvia en el San Martín, si no hubiera sido mejor quedarse en casa viendo a la sueca de Tinelli.
Pero…, el segundo marcador central de la visita, Alberto Alarcón intervino dos veces en el partido, en ambas fue amonestado (una en cada tiempo) y a los 6 del complemento dejó a su equipo en inferioridad numérica y le abrió el panorama a un Santamarina hasta allí, sin brújula.
Sin Alarcón, Torrente mandó a Jorge de central y se quedó con tres en el medio, por lo que las bandas le quedaron desprotegidas al “chaira” y eso comenzó a ser aprovechado por los muchachos de Coleoni, que se animaron a jugar un poco más y más cerca del arco rival.
Así fue que a los 11 minutos del ST, una buena combinación de Michel y Tellas culminó con el pase en cortada del 9 a su compañero y cuando intentaba cerrar Esteban Erramuspe, apareció por detrás Michel que obligó al error del defensor del conjunto olavarriense y de emboquillada, dejó sin reacción al arquero Mocoroa y estampó el 1 a 0.
A partir de allí, Santamarina controló el partido, mientras que el chaira acusó el impacto y perdió el poco panorama que intentaban poner Abán y Loncón. Por eso, Torrente mandó a la cancha a Vazzoler y Linares, con la intención de mejorar en recuperación y creación, aunque estos hombres no gravitaron.
El conjunto local pudo haber aumentado en alguna contra, especialmente con el buen ingreso de Bucci, que se ofrecía como salida clara por la izquierda, pero entre el egoísmo de González, los movimientos para la tribuna de Prudencio (ingresó por Tellas) y el cansancio de los volantes para llegar al área, terminó con la soga al cuello porque Racing trató de quemar las naves con algún centro perdido.
Para el final, solo quedó la impotencia de Racing, que veía que el partido se iba y no se le caía una sola idea y terminó expulsado David García Lorenzo, al ver la segunda amarilla en una dura entrada sobre González. Pero el árbitro Presa, conocido en el fútbol federal de la región por sus diarreicos fallos, decidió no sancionar una desquiciada patada de Linares sobre el propio González, desbordante de la coloquial “mala leche”, que el “colegiado” ignoró porque un minuto antes había recibido un furibundo reto del capitán visitante, Altamirano.
Santamarina festejó, por los tres puntos en un partido muy “chivo”, porque la suerte se volcó a su favor y si bien quedaron muchas deudas futbolísticas, el equipo llegará entonado a su visita a Gimnasia de Concepción del Uruguay el domingo venidero.

SINTESIS
SANTAMARINA (Tandil): (1) Daniel Bertoya; Matías Gogna, Martín Aguirre, Emiliano Capella y Walter Ledesma; Arnaldo González, Mauricio Scaglia, Germán Palacio y Román Strada; Martín Michel y Gabriel Tellas. D.T.: Gustavo Coleoni. SUPLENTES: Damián Cebreiro, Juan Compagnucci, Germán Giannaccini, Diego Bucci, Rodolfo Valerio, Pablo Cerfoglia y Angel Prudencio.

RACING (Olavarría): (0) Martín Mocoroa; Cristian Draghi, Esteban Erramuspe, Alberto Alarcón y Ezequiel Molina; José Loncón, Ramiro Jorge, David García Lorenzo y Juan Berdún; Gonzalo Abán y Oscar Altamirano. D.T.: Diego Torrente. SUPLENTES: Cristian Bucci, Claudio Ferreyra, Diego Nasello, Walter Linares, Francisco Vazzoler, Emiliano Piecenti y Leandro Teijo.

GOLES: 56' Esteban Erramuspe (e/c- S).

CAMBIOS: 63' Angel Prudencio por Gabriel Tellas, 70' Diego Bucci por Mauricio Scaglia y 82' Rodolfo Valerio por Martín Michel (S) - 14' Diego Nasello por Cristian Draghi, 63' Francisco Vazzoler por Diego Nasello y 63' Walter Linares por Juan D. Berdún (R).

AMONESTADOS: Mauricio Scaglia, Walter Ledesma, Matías Gogna y Rodolfo Valerio (S).

EXPULSADOS: 51' Alberto Alarcón (R) - 89' David García Lorenzo (R).

ARBITRO: Federico Presa (Mar del Plata). ASISTENTES: Sebastián Ranciglio (Casilda) y Martín Saccone (Miramar).

ESTADIO: Estadio municipal “Gral. San Martín”.

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