Porque la alegría del final no puede hacer olvidar todo lo que pasó noventa minutos antes. Porque Tesorieri volvió a adolecer de un patrón de juego, de un orden, de la idea que se necesita para proponer un partido distinto.
Ayer, el juego fue de malo a muy malo en los primeros cuarenta y cinco minutos. La pelota fue de un campo al otro, sin un destino fijo, los dos trataron de jugar lo más lejos posible de su arco y si bien lo consiguieron, olvidaron el arco de enfrente.
Tan así resultó el desarrollo, que cuesta encontrar una situación generada desde el buen juego. La única acción seria la tuvo la visita, con un tiro libre de Ibáñez, allá por los 18´ que dio en la parte de arriba del horizontal.
Tesorieri, con algunas variantes obligadas y cambios posicionales, trató de hacerse dueño del medio con el tándem Centurión-Bajinay, pero allí presionó la visita, que pobló ese sector.
Por allí se movieron Ibáñez, Rojas y Marín, que tirado unas metros atrás trató de juntarse y cuando se hizo de la pelota, buscó siempre las subidas de Carrión, por donde se tiró permanentemente Cisterna y complicaron a Quinteros.
Igualmente San Lorenzo tampoco tuvo mucho más que eso, su juego no tuvo precisión y perdió presencia en los metros finales, donde la última línea de Tesorieri se mostró muy expeditiva.
Para la segunda mitad, el juego no tuvo demasiados cambios. Tesorieri siempre condicionó sus ataques al pelotazo largo en búsqueda de los solitarios Claudio Núñez --perdió en su mano a mano con Castiglioni-- y Nicolás Herrera, que aún cuando retrocedió unos metros, le costó tener la pelota y encontrar situaciones propicias.
Con ese panorama, las buenas intenciones de Lucas Ceballos chocaron con la doble marca, porque el rival siempre presionó sobre quien tenía el balón.
Entonces, todo quedó limitado a una pelota parada y por esa vía intentaron los dos, pero sin éxito. Allá por los 25´ la visita elaboró la única del partido, gran combinación del medio a la derecha y la entrada libre de Carrión, quien sacó un fuerte remate que tapó en gran forma el arquero Reynoso.
El ritmo, ese de correr mucho y pensar poco, fue condicionando respuestas físicas y en las variantes, Tesorieri encontró algo más.
Juan P. Ceballos fue al lateral y Claudio Molina se paró de cinco por la lesión de Centurión, entonces el local tuvo más ritmo, aunque nunca abandonó la fórmula de tirarla larga.
Por eso el partido se iba sin mayores situaciones, cuando la visita tuvo la última. Una definición hacia atrás de Sandrone exigió la gran tapada del arquero Reynoso.
En la salida, --minuto 93´-- la fórmula de siempre, la pelota larga que fue a buscar Alfaro, el cabezazo que derivó un poco más allá de la media luna del área y allí estaba Nicolás Herrera, que sin dejarla picar le metió un bombazo que se bajó sobre el segundo palo de un sorprendido Villafañe, golazo y Tesorieri, casi sin imaginarlo, se quedó con todo.
SINTESIS
AMERICO TESORIERI (La Rioja): (1) Mario J. Reynoso; Claudio Molina, Marcos Luna, Renzo Díaz y José M. Quinteros; Nicolás Bajinay (Diego Leiva), Fabián Centurión (Juan Pablo Ceballos), Miguel Mercado y Lucas Ceballos; Claudio Núñez (Matías Alfaro) y Nicolas Herrera. D.T.: Isidro Ceballos.SAN LORENZO DE ALEM: (0) Ubaldo Villafañe; Jesús Carrión, Heraldo Aguirre, Agustín Castiglioni y Gabriel Pajón; Leonardo Rojas, José Ibáñez (Sebastián Silva), Mauro Maldonado (Roberto Sandrone) y Javier Marín; Alejandro Bordanaro (Gastón Olmos) y Raúl Cisterna. D.T.: Roque Ferreyra.
GOLES: 90' Nicolás Herrera (T).
ARBITRO: Misael Argañaraz. ASISTENTES: Andrea Lotto y Carlos Roldan (Terna de Santiago del Estero).
ESTADIO: Pedro Camilo Alem.
No hay comentarios:
Publicar un comentario